El treinta aniversario de la creación del Instituto Cervantes es el acto que el rey Felipe VI ha elegido para el debut en solitario de su hija Leonor en la agenda oficial de la Familia Real.
Curiosamente, también a los quince años su padre fue enviado por su abuelo, Juan Carlos I, a Colombia para asistir, en representación de la Familia Real, al 450 aniversario de la fundación de Cartagena de Indias.
En ambos casos, los príncipes de Asturias recibieron el encargo de Su Majestad de presidir dichas conmemoraciones y representar a la Jefatura del Estado español.
El concepto de la representación
El Real Decreto 2099/1983, sobre el Ordenamiento General de Precedencias en el Estado, introduce en el ámbito del protocolo el concepto de la representación. Lo podemos leer en el artículo 9 en los siguientes términos:
La persona que represente en su cargo a una autoridad superior a la de su propio rango no gozará de la precedencia reconocida a la autoridad que representa y ocupará el lugar que le corresponda por su propio rango, salvo que ostente expresamente la representación de Su Majestad el Rey o del Presidente del Gobierno.
Por lo tanto, y a efectos protocolarios, no se reconoce la representación, salvo la de quien ostente expresamente la de Su Majestad el rey o del presidente del Gobierno.
En consecuencia, salvo quien represente al jefe del Estado o al jefe de Gobierno, quien represente a cualquier otra autoridad ocupará el lugar que por sí mismo, por el cargo que ocupa, le corresponde.
En resumen, en protocolo de Estado solamente las autoridades que acudan a un acto en representación del jefe del Estado o del jefe del Gobierno, ocuparán el lugar de la persona que representan, es decir, adquieren su precedencia.
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Fotografía: © EFE Cartagena de Indias (Colombia) 1983