Ser Comunicación

La accesibilidad en los eventos, los Juegos Paralímpicos

Los Juegos Paralímpicos se celebran en las mismas instalaciones que los Juegos Olímpicos unos días después de finalizar estos. Y así va a ser, por lo menos, hasta el año 2032, tras el acuerdo firmado entre el Comité Olímpico Internacional (COI) y el Comité Paralímpico Internacional (IPC).

Esto significa que la infraestructura creada para la celebración de los Juegos va a ser compartida. En consecuencia, su diseño debe dar respuesta a las necesidades y peculiaridades de todos los deportistas. En este sentido, el IPC ha publicado su Guía de accesibilidad para ayudar a los comités organizadores y a la ciudad anfitriona de los Juegos en su planificación y realización.

El Libro blanco del deporte de personas con discapacidad en España nos indica cuáles son las medidas a adoptar en relación a la accesibilidad de las instalaciones deportivas. Unos aspectos que también debemos tener en cuenta cuando organizamos un evento, ya sea este deportivo o no.

Accesibilidad motora

Las principales cuestiones a tener en cuenta en el diseño relacionados con alteraciones en las funciones de movimiento son las siguientes:

  • Resolver los desniveles mediante rampas accesibles y ascensores alternativos a las escaleras para que aquellas personas con limitaciones musculares, articulares y/o de falta de equilibrio puedan recorrerlos sin dificultad.
  • Dotar de suficiente espacio a todas las circulaciones, sin dar lugar a espacios estrechos.
  • Ubicar zonas de descanso en los recorridos largos.
  • Las puertas automáticas bien calibradas resultan más sencillas de utilizar al no precisar fuerza o existir mecanismos de retorno.
  • Los mecanismos que no precisan de utilizar dos manos a la vez son accesibles para un mayor número de personas y su manejo más cómodo y sencillo para todas.
  • Las superficies continuas, sin cejas ni resaltes, y con acabado no deslizante evitan riesgos de caídas.
  • La protección de los desniveles y el equipamiento mediante pasamanos y barandillas de rampas, escaleras y ascensores ayuda a las personas a desplazarse con mayor seguridad, a descansar para apoyarse a mantener el equilibrio, etcétera.
  • Dotar a los asientos de respaldo y reposabrazos para que la maniobra de levantarse desde la posición sentada o tumbados resulte más sencilla y segura, y en algunos casos contar con productos de apoyo, como pueden ser las grúas elevadoras.
  • A la hora de diseñar el alcance manual y visual de determinados elementos, debe considerase el mismo tanto para una persona en bipedestación como desde posición sentada, asegurando así también la correcta utilización de personas usuarias de silla de ruedas.

Accesibilidad sensorial

Las principales medidas a tener en cuenta en el diseño relacionado con alteraciones en las funciones sensoriales son las siguientes:

  • Identificación de objetos plurales (botoneras, rótulos,…). Para ello resulta útil usar fuertes contrastes, tamaños adecuados y recursos táctiles.
  • Detección de obstáculos (desniveles, elementos salientes,…). Existen recursos como los pavimentos podotáctiles y la proyección horizontal de objetos volados.
  • Determinación de direcciones y seguimiento de itinerarios. También pueden utilizarse los pavimentos podotáctiles, los colores contrastados y los planos de mano táctiles, entre otros.
  • Obtención de información escrita en otros medios como el acústico y el táctil.
  • Identificación y obtención de señales e información sonora (alarmas, voz, timbres, música,…) por medio visual.
  • Los espacios que se encuentran comunicados disminuyen la sensación de aislamiento respecto al entorno y se aumenta la seguridad, por ejemplo, con la instalación de ascensores panorámicos.
  • Una adecuada atención al cliente precisa de canales alternativos al teléfono para la gestión y que el personal tenga conocimientos de lengua de signos.

Las dimensiones antropométricas

Tal y como nos indica, también, el Libro blanco del deporte de personas con discapacidad en España, cuando se diseñan entornos hay que tener en cuenta los datos antropométricos de los usuarios. Es decir, las proporciones y medidas del cuerpo humano.

Esta información se relacionará con las dimensiones de los espacios mínimos que necesita una persona para desenvolverse. De esta manera, se conseguirán espacios capaces de dar soluciones a los diferentes tipos de usuarios.

Estas dimensiones antropométricas pueden referirse tanto en postura estática como funcional.

©PortugalBueno2021

Foto de Tecnología creado por freepik – www.freepik.es