La conferencia “Sigue tu instinto: sé buena persona” ha nacido gracias al Movimiento Familiar Cristiano de Orihuela (Alicante). Su invitación para participar en las XII Jornadas de la Familia, y para hablar sobre el aspecto que yo quisiera de la misma, me ha brindado la oportunidad de reflexionar sobre mi papel en mi familia. Desde aquí os doy las gracias.
Lo más gratificante de la reunión ha sido descubrir como unas personas deciden, libremente, pasar un rato contigo sin decir ni “mu”. Es agradable conocer a gente que está dispuesta a regalar su tiempo para escuchar a otra persona. Y esto es ¡una gran responsabilidad!
Todos ellos, cada una de estas personas, se merecen más que yo el detalle con el que me obsequiaron al final de la intervención.
El mensaje de esta noche ha sido que el ser humano tiende, por instinto, a ser buena persona, y que para lograrlo cuenta con dos herramientas excepcionales: la sonrisa y el prójimo. Las personas conseguimos ser lo mejor de nosotros mismos cuando dejamos de lado nuestro ego, y nos dedicamos a ayudar a los demás, a hacer más felices a las personas de nuestro alrededor. ¿Y qué lugar mejor donde comenzar que en nuestra propia familia? Y, por supuesto, el territorio ideal donde terminar es en la sociedad. Porque como decía el poeta griego, Sófocles, “el que es bueno en familia, es también buen ciudadano”.