¿Cuál es la labor de un periodista? Sencillamente informar, dando respuesta a los derechos fundamentales del ser humano sobre la libre información y la expresión de las ideas. Los periodistas no deberían ser héroes. Solamente debemos ponernos al servicio de las personas, informativamente hablando. Ya sea para dar a conocer lo positivo y bueno del ser humano, como para defender, denunciar, informar y mostrar la realidad. Todo esto con un único objetivo: proteger al ser humano de sí mismo. Sin embargo, la sociedad no permite que el periodista pueda ejercer su profesión, para mí vocación, como es debido. Y lo que debería ser un trabajo sencillo y gratificante, se puede convertir en un verdadero vía crucis.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos ha publicado la Guía para implementar medidas cautelares en beneficio de defensores de los derechos humanos en México. Esta publicación intenta dar respuesta al incremento de agresiones a periodistas ocurridas en México. Pero, por desgracia, esto se puede aplicar a muchos otros países.
La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en México, en conjunto con la Secretaría de Gobernación y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, han establecido unos principios para el diseño del “Mecanismo de Protección para los Periodistas y personas Defensoras de los Derechos Humanos”. Estas indicaciones hacen referencia a:
- El mecanismo debe enfocarse a defensores y periodistas.
- El mecanismo debe tener como características: ser nuclear, eficaz, ágil, flexible, confiable, con capacidad de reacción inmediata y de adaptación.
- Al mecanismo lo debe regir el principio de transparencia.
- Se debe analizar qué información será de carácter reservado y quienes tendrán acceso a ésta.
El Comité de Derechos humanos ha enviado una serie de recomendaciones al Estado mexicano con el objetivo de garantizar a los periodistas el derecho a la libertad de expresión en la realización de sus actividades. Estas sugerencias se refieren a:
- Tomar medidas inmediatas para proporcionar protección eficaz a los periodistas y los defensores de los derechos humanos, cuyas vidas y seguridad corren peligro a causa de sus actividades profesionales, en particular mediante la aprobación oportuna del proyecto de ley sobre los delitos cometidos contra la libertad de expresión ejercida a través de la práctica del periodismo.
- Velar por la investigación inmediata, efectiva e imparcial de las amenazas, ataques violentos y asesinatos de periodistas y defensores de los derechos humanos y, cuando proceda, enjuiciar a los autores de tales actos.
- Proporcionar al Comité información detallada sobre todos los procesos penales relativos a amenazas, ataques violentos y asesinatos de periodistas.
- Tomar medidas para despenalizar la difamación en todos los estados.
La lucha de un periodista es constante y de un doble filo. Por un lado, defender el derecho a la información y por el otro defender el deber de ejercer ese derecho. Es cierto que los periodistas no somos héroes, pero la mayoría están hechos de una pasta especial. Y en lugar de estar agradecida la sociedad por la labor que realizan, desde los poderes políticos, económicos, militares, empresariales… se les tacha de todo lo peor, simplemente para dar salida a sus intereses egoístas y particulares.
La fotografía que ilustra esta entrada ha sido elegida de la web de Círculo de Periodistas de Bogotá.