Ser Comunicación

El a, b, c del protocolo social

El protocolo, el saber estar, las buenas maneras,  no es simplemente una lista de reglas, más o menos larga. Son unas normas de conducta que necesitan ser aplicadas con corazón y con sentido común en todas y cada una de las situaciones.

Existen unos principios generales del protocolo social que se deben emplear en cualquier situación:

  1. Respetar la condición y categoría de la persona con quien se trata y el lugar en que uno se encuentra.
  2. Seguir los usos y reglas que demanda cada momento y situación.
  3. Tratar a los demás como uno mismo desea ser tratado.

Es verdad que hay que ser amable en el trabajo, en las relaciones humanas, pero esto no basta. Es necesario saber estar, saber comportarse en cualquier lugar y en cualquier circunstancia. Esto nos llevará a actuar con cortesía y educación, pero también nos lleva a actuar con eficacia en el trato social.

Me explico. La cortesía se basa principalmente en dos principios:

  • Por una parte la comodidad: cuando varias personas se presentan delante de una puerta, es necesario saber cuál es la que debe pasar primero, sino habrá empujones y encontronazos.
  • Por otro lado, hay un fin más elevado, el respeto al prójimo.

Y todo esto ¿a dónde nos lleva? Pues a considerar la dignidad de las personas por encima de todo. Las buenas costumbres, el protocolo social, no es  una manera de comportarse de unos pocos, de la alta sociedad. El protocolo social es poner en práctica el respeto que cada persona se merece, es tomar conciencia de la dignidad humana.

Esto lo tenemos que aplicar en todo.

El protocolo social no es simplemente el saber recibir o poner una mesa. Es mucho más. Por ejemplo, cuando invitamos a alguien, o nos inviten, no es, o no debe ser, simplemente el acto de comer, es saber otorgar a cada uno el lugar, o sitio, que le corresponde.

No se invita a comer. Se invita a reconocer y aceptar la categoría de esa persona y, según la invitación, ese reconocimiento corresponderá a lo que se es o a lo que se hace.

Esto es en definitiva el protocolo, esto es en definitiva, educación.

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