José Antonio de Urbina y de la Quintana es uno de los mejores expertos en protocolo que ha tenido España. Autor de varios libros de esta materia, hoy quiero presentaros uno que adquirí en octubre de 2008: 100 preguntas básicas de protocolo.
La originalidad de este libro es la forma de mostrar la información que contiene. El autor lo hace de una manera novedosa, ágil y entretenida: pregunta-respuesta.
Gracias a este formato, su lectura resulta fácil, al igual que la adquisición de los conocimientos se produce con agilidad.
Personalmente, además de aprender y afianzar conceptos relacionados con el protocolo, con la lectura de 100 preguntas básicas de protocolo, descubrí a un José Antonio de Urbina amable y con un gran sentido del humor e ironía.
Os destaco algunos de los párrafos que en su día me llamaron la atención:
¿Por qué se utiliza la alfombra roja?
Porque el color rojo, es decir, púrpura, desde la antigüedad clásica fue el símbolo mítico del mando supremo, del máximo poder, del mayor rango.
¿Qué disposición conviene tomar en la mesa a la hora de negociar?
Se dialoga, se discute y se negocia alrededor de una mesa. Esta mesa es esencial y ha de ser como el traje de un buen sastre, hecha a la medida de la negociación.
¿Cuándo se permite fumar?
Es de soberana «mala educación» fumar al principio y durante la comida.
¿Cuál es la duración idónea de una sobremesa?
La sobremesa es esencial en la comida, pero ¡por favor, no la alarguen demasiado! Márchense a tiempo y recuerden que hacerlo es una clara señal de educación.
¿Influye el sexo a la ahora de confeccionar la lista de invitados?
En las comidas, almuerzos y cenas por igual, nunca puede haber más señoras que caballeros.
¿Cómo se rige una caravana de vehículos oficiales?
Conviene, asimismo, disponer en la caravana de un vehículo de repuesto para el VIP (por si sufre una avería). Este vehículo es denominado en España «de respeto» (el término tiene carácter histórico).
Y para terminar, ¿en qué consiste la buena educación?
El termómetro de la verdadera educación de las personas está en su vida cotidiana. Como hay de todo «en la viña del Señor», es frecuente encontrar personas muy «educadas» en situaciones importantes y ante personalidades relevantes, que al tiempo son totalmente ineducadas en su casa, por la calle, al volante.